Su bebé enfermaba cada día más, hasta que vio su nariz y descubrió el horroroso motivo


Según cuenta nolocreo, Meghan Budden, una mujer de Nueva Jersey, se percató que ella y su bebé tenían unos puntos negros en la nariz. No entendía qué eran y se puso a pensar en lo que había hecho recientemente.


Al final logró atar cabos y pensó que la sustancia podría ser el hollín producido por una vela perfumada que había encendido la noche antes. Fue a leer el paquete y –efectivamente– descubrió una advertencia del fabricante que explicitaba usar las velas durante tres horas máximo. Ella había dejado la vela encendida durante seis horas, por eso la habitación estaba llena de hollín y ellos lo habían inhalado sin saberlo. El hollín parece inofensivo pero realmente es muy peligroso si se aspira, porque puede provocar enfermedades coronarias hereditarias y diferentes problemas respiratorios como asma o bronquitis. Este caso nos enseña que es totalmente necesario fijarse en las instrucciones de todos los productos. 

Advertencia en la vela | Cedida