Conoce al Ave del Año 2012 Haz click aquí A diferencia del resto de las aves, que carecen de pabellón auditivo externo, los búhos y otras rapaces nocturnas poseen una especie de orejas que les ayudan a detectar una presa en la oscuridad de la noche. Con objeto de localizarla con precisión, la rapaz mueve la cabeza de un lado a otro con una extraordinaria facilidad, y esto alentó la creencia de que, si una persona daba vueltas alrededor de un búho, podía provocar que estas aves se troncharan el cuello. Lo cierto es que el búho real y el chico pueden girar la cabeza hasta 270 grados y que, gracias a esto, abarcan un campo de visión de 360 grados sin necesidad de moverse de sitio. Por www.muyinteresante.es |