Esta pequeña perrita se llama Karma y tiene 5 meses. Cuando llegó a su hogar se encontró al pequeño Kayden, un bebé de un año de edad. Como si de dos hermanos se tratara, van creciendo juntos y comparten hasta carricoche y biberón.
¿Problema de identidad? Nah, ella se ve feliz.
Siempre imitó a su humano y a nadie parece molestarle.
Todo empezó cuando se robó el chupete del pequeño Kayden.
Y ahora también bebe su leche en biberón y utiliza el coche de su pequeño amigo humano.
Ah, también tiene su pijama de osito.
Ahora solo queda esperar a que crezca…






