2 irlandeses se emborrachan y acaban en Iraq combatiendo al ISIS


Luego de beber cantidades industriales de whisky Johnny Walker, uno esperaría terminar desmayado; en el hospital; en la cárcel; en la cama con alguna chica extraña; en fin, hay múltiples opciones. ¡Pero nunca imaginaríamos despertar en Irak, peleando contra el Estado Islámico!


William Meara, de 26 años; y Craig Reynolds, de 24, son irlandeses, pero llevan dos meses recorriendo el Medio Oriente, y se han vuelto amigos de los combatientes kurdos que se oponen a ISIS.


Este par de aventureros ya se encontraba en esta zona, no es que en la borrachera hayan tomado un avión y llegado a la zona de guerra, pero la monumental borrachera que agarraron estos dos, sí tuvo lugar ya en el sitio.

Se hicieron amigos de un combatiente canadiense de las tropas de paz en Sulaymaniyah, y luego de varios tragos, el soldado les dio trajes de combatientes kurdos, los subió a un vehículo y los condujo a la “única zona de guerra activa en el mundo”… los llevó a su base en Daquq.


A través de su blog, Will contó cómo sucedió esta aventura:

“Debimos haber dicho algo cuando salimos con él (el soldado canadiense) la noche anterior, y así fue como tuvo la idea; antes de que supiéramos que nos reuniríamos con todos esos oficiales de alto rango. Había un comandante del área local con nosotros.

“Para ser honesto, era absolutamente aterrador. Probablemente fue una de las cosas más espantosas que he hecho”.



Expertos en seguridad han señalado que lo que hicieron estos dos tipos fue “ingenuo” (por llamarlo de algún modo), ya que fueron conducidos a un búnker que había sido atacado por francotiradores de ISIS apenas una semana atrás.

Estos viajeros estaban tratando de juntar donativos para los refugiados en Mosul, cuando se toparon con el canadiense…


“Yo estaba tratando de tomar fotos, pero los chicos me decían: ‘no te detengas; esto es grave’.

“Estábamos hablando con los chicos en el puesto de avanzada, y a pesar de cualquier cosa que dijeran los muchachos de nuestro convoy, decidieron que no era seguro para nosotros estar allí, porque no teníamos entrenamiento militar.

“Estaban haciendo gestos, en otras palabras, estábamos en una posición vulnerable y no debíamos estar allí. Aunque pudiera no pasar nada, no era seguro”.


La mayoría de las personas, dijo Craig, consideran a lugares como Irak, Pakistán e Irán, lugares terroríficos, “pero aparte de los lugares donde hay combates cara a cara, el resto es completamente seguro”.

Además, la gente, como los kurdos, son muy hospitalarios, y al respecto Will comentó:

“Los kurdos son de las personas más agradables que he conocido en mis viajes y, a pesar del peligro inminente, nos entretenían, sonreían y nos recibían con los brazos abiertos.

“Han tenido una historia difícil en los últimos tiempos, y a pesar de todo, siempre te reciben con una sonrisa que podría calentar al Sol”.


Vaya aventura… y todo por una borrachera…