10 geniales y fáciles formas de enseñar matemáticas a los más pequeños


En el mundo existe una gran variedad de ciencias divertidas. Nosotros estamos convencidos de que todas son muy interesantes pero no nos explicaron todo de forma entretenida ni con mucha imaginación. Hemos decidido convertirnos en niños otra vez e imaginar la manera en la que nos hubiera encantado que nos enseñaran las matemáticas.




Dulces sobre la mesa


Este tipo de matemáticas le encantará a cualquier niño. Prepara unas hojas de papel con distintas cantidades de círculos y llénalos con tu hijo para formar diferentes cifras. Puedes reemplazar dulces con cualquier otro tipo de comida que le guste al pequeño, empezando por frutas y bayas hasta cereales crujientes.

Ganchos divertidos


¿Mamá va a colgar la ropa? No, hoy preparó estos divertidos ganchos de colores para otra cosa. Dibuja en unos palitos de helado distintas cantidades de manzanas, y en los ganchos escribe diferentes números. A tu hijo seguramente le encantará hacer pares del palito y del gancho correspondientes.

Matemáticas de malvaviscos


Este método les encantará a todos los amantes de los dulces. Usa una hoja de papel para recortar una taza grande y agrégale tantos malvaviscos como puntos te muestre el dado.

Pausa musical


Es una excelente idea para aquellos que están dispuestos a escuchar un poco de música desafinada en el nombre de las matemáticas. Dale a cada tecla cierto número (usa un papel adhesivo) y pídele a tu hijo que componga, por ejemplo, el número 10.

Cultiva tu jardín


Puedes cultivar tu propio pequeño jardín usando pompones de estambre o papel. También puedes utilizar unos círculos de una esponja ordinaria pintada de distintos colores. ¡Es un pasatiempo excelente especialmente para la época de Navidad!

¿Más o menos?



Este entretenido cocodrilo le enseñará a tu hijo a entender la diferencia entre los símbolos «más» y «menos».

Embellece al hombre de nieve


Este también es un excelente pasatiempo navideño. Al cambiarle los sombreros al hombre de nieve, tu hijo tendrá que ponerle un nuevo traje también. Es un pasatiempo que requiere bastantes preparativos pero una vez hecho, el juego servirá durante mucho tiempo.

Fracciones de manzana


Oh, esas fracciones... ¡No se puede imaginar a un mejor maestro que una manzana! Porque se divide excelentemente en cuartos que a continuación tu hijo podrá comer como un premio por sus logros académicos.

Fracciones + reloj: un método infalible


Esta opción es para aquellos que ya han dominado las fracciones o el reloj pero aún sienten dificultades con la segunda parte. Usando un reloj como ejemplo, es muy cómodo explicar las fracciones y, al mismo tiempo, las nociones como «cuarto» y «las tres y media» ya no le causarán problemas a tu hijo.

¡Saltemos!


Esta es otra forma de conocer los números. Prepara sobre el piso unos números grandes hechos de cinta adhesiva y que todo el pasillo se convierta en el campo de entrenamiento del joven saltarín. Para los más avanzados puedes complicar la tarea inventando ejemplos aritméticos cuya respuesta sería no una palabra sino la cantidad de saltos. ¡La diversión para tu niño está garantizada!

Bonus: enséñale a entender el reloj


Este reloj interactivo le ayudará a tu hijo a entender la hora y, si tiene dudas, al desdoblar la hoja siempre podrá consultar la respuesta correcta. Preparando un reloj así, pon antención para que las manecillas de horas y minutos coincidan con los colores de las horas y los minutos.