Presumir tu forma de vida
Que todos tus contactos vean que llevas una vida de lujo no es una buena idea, por dos razones: 1) hace parecer que tienes baja autoestima y que necesitas que los demás reconozcan que vales por tu dinero, y 2) es inseguro, pues puedes ser blanco de la delincuencia (hay veces que no sabemos qué tipo de contactos tenemos agregados).
Hacer publicaciones todo el tiempo
¿No te cansas de estar publicando a cada rato? De verdad, hace parecer que no tienes otra cosa qué hacer más que estar pegado en el Facebook. Esas personas que a cada rato publican que ya se levantaron, que van en el autobús, que ya llegaron a la escuela/trabajo, que ya van a comer, que ya van a cenar, que ya se van a dormir… de verdad que a nadie le interesan estas publicaciones.
Expresar tu odio por X cosa y hacerlo más que evidente
Está bien si no te gusta la cumbia, o si eres un grinch de primera y no te gusta la Navidad, o si eres un amargado y no te late el Día de San Valentín… sí, todo eso está bien, pero no a todos les interesa saber tu odio por esas cosas, y publicando constantemente en su contra sólo lograrás caerle mal a los contactos tuyos a los que sí les gusta disfrutarlas.
Creer que tus amigos y contactos son tus clientes
¿Eres de los que se la pasan subiendo cosas para vender a su muro? ¿O de los que a cada rato piden likes para sus fanpages? Entonces eres un contacto un poco molesto.
Selfies
Una que otra selfie está bien, pero hay personas que se la pasan subiendo una tras otra, o sesiones enteras, y esto llega a ser odioso para sus contactos. Además, algunos psicólogos afirman que quienes suben selfies frecuentemente tienen problemas de autoestima, pues buscan que los demás los valoren por su imagen.
Indirectas
Si le quieres decir algo a alguien, díselo en persona o en su muro personal, evita tirar indirectas, pues te ves mal y a veces lograrás que otros contactos se pongan el saco y crean que la pedrada es para ellos.
Opinar en los estados ajenos
Aunque bien es cierto que Facebook se hizo para opinar en el estado de cualquier contacto, no hay nada peor que meter tu cuchara en las publicaciones donde nadie te llama, sobre todo cuando lo haces para criticar al autor de la publicación.
Contenidos inapropiados
Fíjate bien qué cosas compartes y piensa bien qué dirán tus amigos y familiares sobre ello. Facebook también te forja una reputación, y hay una frase que dice que “eres lo que compartes en Facebook”. Si continuamente subes contenido violento (videos de accidentes mortales, por ejemplo), obsceno (desnudos o imágenes que lleven sexo implícito), grotesco (niños con deformaciones), o te la pasas criticando a medio mundo, o eres de los molestos que se meten en conversaciones ajenas para poner cadenas, te ganarás una mala reputación y hasta se podría perjudicar tu imagen en la escuela o en el trabajo.
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