John Thuo es uno de tantos niños abandonados y sin hogar que tiene que pedir limosna para sobrevivir en las calles de Nairobi, Kenia, algo relativamente común allí. Su vida cambió para siempre el día que se cruzó con Gladys Kamande.
Thuo se encontraba pidiendo en un transitado cruce de Nairobi, acercándose a las ventanas de los coches para mendigar unas monedas. Pero todo cambió cuando al acercarse a un coche vió a Gladys, sentada dentro del coche llena de aparatos que le ayudaban a respirar y con unas gafas oscuras que cubrían su ceguera.
John quedó impactado al verla y se dio cuenta en ese instante de que aunque tu estés mal siempre hay alguien que lo está pasando peor. El pequeño se echó a llorar y le dio a Gladys el poco dinero que había conseguido ese día, todo lo que tenía.
La historia cambió gracias a un transeúnte que vio el gesto del niño, tomó una foto que se volvió viral en Internet y entonces el milagro sucedió. En solo 4 días, conmovidos por la historia, miles de personas contribuyeron con donaciones que llegaron a unos 80.000 dólares.
Por su parte John Thuo ganó a la madre que nunca tuvo. Gracias a la repercusión de las fotos y la noticia una mujer llamada Nissy Wambugu decidió adoptar al niño, sacarlo de las calles y llevarlo a su casa para que pudiera ir al colegio. Son historias como esta las que te hacen recuperar un poco la fe en la humanidad.
FUENTE: LIOPARDO