Seguro que muchas de vosotras encontráis, en vuestro día a día, un montón de inconvenientes que os hacen resoplar. Muchas mujeres cuidan con esmero la ropa que va a ponerse, el maquillaje, los zapatos y el bolso que combinan mejor con el modelo y, por supuesto, los complementos. Sin embargo, aunque seáis muy cuidadosas y tengáis todo calculado al milímetro, de repente puedes notar que los zapatos empiezan a hacerte rozadura, que tus medias tienen una carrera o que la varilla del sujetador se te está clavando en la piel.
Bien, son cosas que no se pueden evitar, pero sí reparar. Por eso, hemos hecho una selección de 10 trucos de emergencia que seguramente consigan sacaros de un apuro en alguna que otra ocasión. Sabiéndolos, siempre procurarás tener a mano aquello que podrías necesitar. Toma nota:
1. Para los vestidos con la espalda descubierta, puedes coser la parte delantera de un sujetador económico sin tirantes. Así evitarás lucir la parte de atrás del sujetador
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2. ¿Estás harta de pincharte con las varillas del sujetador? Si te pilla fuera de casa, puedes recortar una compresa y utilizar una de sus partes para cubrir la parte rota por la que se escapa el aro. Así no volverás a pincharte
3. Utiliza dos dedos para para comprobar el ajuste del sujetador. Si no puedes introducir dos dedos debajo de la banda del sujetador, es porque está demasiado apretado
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4. En los días más calurosos, puedes utilizar un salva-slip para evitar que tus prendas favoritas queden marcadas por las antiestéticas manchas de sudor
5. Si de repente te das cuenta de que tienes una carrera en las medias, puedes utilizar esmalte de uñas trasparente o laca para el cabello -aplicar por toda la carrera- para fijarla y evitar que se haga más grande
6. En un momento dado, puedes utilizar una plancha para el cabello para quitar las pequeñas arrugas que arruinen tu look
7. Para agrandar esos zapatos que te hacen daño, mete dos bolsas con agua en las puntas y déjalos toda la noche en el congelador
8. Utiliza un poco de desodorante roll-on para ayudar a aliviar el dolor producido por ampollas y rozaduras, o incluso para evitarlas si sabes que esos zapatos te hacen daño. En este caso, aplica el desodorante directamente sobre el zapato
9. Un trozo de goma de borrar puede ayudar a mantener el pendiente en su lugar en un momento dado
10. ¡Que ninguna cremallera se te resista! Si se ta ha quedado atascada, prueba a untarla con bálsamo labial o frotándola con un lápiz. El carro debería poder subir y bajar de nuevo