Dos hermanos, Allen y Brandon Alexander, intentaron vender un enorme oso de felpa justo en una calle de Los Ángeles. Nadie se detuvo a preguntar por su mercancía y de pronto encontraron a una compradora famosa y generosa.
Hoy compartimos contigo esta pequeña pero enternecedora historia.
El padre de los niños les puso una meta: ganar su primer dinero. Para ello tenían que vender a un enorme oso de 2,5 metros.
Desafortunadamente, nadie se les acercó a los chicos para preguntar por su mercancía. Estaban aburridos y ligeramente desanimados.
De pronto enfrente de ellos se estacionó un auto y de ahí salieron... ¡Angelina Jolie y su hija Shiloh!
Sin pensarlo, la actriz compró el oso. A pesar de que los niños pedían 50 dólares por él, ella pagó esta cantidad a cada uno de los pequeños emprendedores.
Angelina pasó algunos minutos hablando con los niños y sus felices padres. Luego los chicos le ayudaron a la actriz a meter el oso a su auto deportivo.
Angelina no solo apoyó a los niños sino que nuevamente nos recordó que hacer buenas obras es muy sencillo.
Fuente tmz
Foto de portada tmz.com